"Soy la niña siglo veinte,
tengo ganas de jugar, y no creo en los fantasmas,
ni en la cosas de asustar.
Una noche que se fueron,
mis papas a divertir,
vi salir de un agujero,
un ratoncito feliz.
Le metí en la cama,
le dí el biberón,
y al llegar mis padres,
¡ay la que se armó!
Le metió en la cama,
le dio el biberón,
y al llegar sus padres,
¡ay la que se armó!
Deja ya ese ratoncito,
que tal vez pudiera ser,
una bruja disfrazada,
con muchísimo poder.
Soy valiente y no me asustan,
los fantasmas a gogó
ni las brujas, ni los ogros
porque tengo a mi ratón.
Le metí en la cama
le dí el biberón
y al llegar mis padres
¡ay la que se armó!
Le metió en la cama
le dio el biberón
y al llegar sus padres
¡ay la que se armó!
De las brujas de los cuentos,
que me cuentan mis papás,
yo me río muy contenta,
no asustándome jamás.
Porque tengo mi escopeta,
alegría y buen humor,
sé rezar y tengo amigos,
y un ratón muy juguetón.
Le metí en la cama
le di un biberón
que al llegar mis padres
¡ay la que se armó!
Lo metió en la cama
le dio el biberón
y al llegar sus padres
¡ay la que se armó!
Lo metió en la cama
le dio el biberón
y al llegar sus padres
¡ay la que se armó!"
Inquietante canción e inquietante imagen.
Ésa soy yo, en tierra de nadie. Ni niña, ni mujer: bicho palo con aspiraciones seductoras (miremos la pose -y la indumentaria- con indulgencia, por favor).
Y, sin embargo, qué inocente todo y qué tierno. Nada de ladysgagas, ni justinbiebers, ni crepúsculos, ni janasmontanas... Todo tan simple y tan ingenuo. Todo tan a la vista. Todas las redes sociales tejiéndose al aire libre, en el paseo, en el río, en las calles...
Imagen: fotografía familiar (principios de los años 70)
¿qué es peor? ¿encontrarte un ratón y meterlo en la cama y darle el biberón? o ¿encontrarte un ratón y twittear el hallazgo????!!!
ResponderEliminarYo también tuve una infancia sin smartphone y ... ¡me gustó! Pasaba gran parte de mi tiempo libre jugando con amigos, vecinos, primos... La imaginación nos iba más rápida que google y siempre encontrábamos algo divertido que hacer. Me parece bien que un niño sepa cómo usar un; móvil última generación pero...¡también tiene que tener un espacio para jugar con palos, piedras, arena, juguetes sin pilas ni enchufe...
Me gusta tu foto. Posas a lo celebrity!!!
Besos
Ja, ja, twiteear el hallazgo. ¡Qué bueno! Yo a veces hecho un vistazo en una página donde recogen cosas comentadas en twitter o facebook y es alucinante lo que se puede llegar a contar.
EliminarUn abrazo.
Una imagen muy tierna y llena de frescura.
ResponderEliminarSí, es cierto, antes estaba todo a la vista, lo que daba miedo y lo que daba alegría. Ahora tejemos alegrías, amistades, amores, etc... en la red invisible, imprecisa y fría, y sí, a mí me da un poco de miedo.
Saludos
Cierto, las chicas siglo XXI tenemos ahora más motivos para asustarnos, Mª Teresa.
EliminarSaludos.
Uf, qué terreno. No sabía, cuando tanto lo anhelaba, que tanto como me pareció que tardaban en llegar determinados años, luego corrieran tanto, tanto.
ResponderEliminarEstás estupenda, nada de bicho palo, posando, como en otras fotos.
Me ha encantado lo que escribes. Esa frase de "todas las redes sociales tejiéndose al aire libre..." es magnífica.
Un abrazo.
El tiempo pasaba tan despacio...
EliminarRecuerdo que tenía una vecina dos años mayor que yo y cuando cumplió trece me costó hasta felicitarla de la envidia que le tenía. ¡Creía que no me iban a llegar nunca!
Gracias por tu comentario pero yo fui bicho palo durante muuuucho tiempo. Ir a comprarme ropa era un suplicio. ¡Con lo que yo hubiera disfrutado ahora con las mini-tallas que están de moda!
Un abrazo.
¿Cómo íbamos a tener miedo sabiendo rezar y con una escopeta?
ResponderEliminarEn esa época éramos "pollitas".
-¿Qué talla?
-De pollita.
Es decir, ni carne ni pescao.
Estás monísima.
Una cosa no cambia con los tiempos: las niñas de esta edad posan todas de manera parecida (sexy).
Besitos,
Yo odiaba que mi madre me pidiera talla de pollita. No sabía dónde meterme.
EliminarY sobre las poses sexys tienes razón pero que hay cambios, fijo: sólo hay que ver las fotos que cuelgan en facebook. Miedo me dan.
Besos.